Pages

Cine y lenguaje

El inquilino (1976), Roman Polanski (fotograma de la película)

En medio del llanto, con las palabras de la locura saliendo una atrás de otra en medio de un proceso creciente de obsesión paranoica: el momento justo, el quiebre estético. Él respira, y el aire movido coloca encima de su cara un mechón de ella tapándole los labios.
No interpreta ese llamado al silencio. El símbolo detrás de esta potente imagen queda sin interpretar.
Entendemos algo de la locura: que el loco no sabe que lo está. Si él comprendiera en medio de qué se encuentra, jamás podría continuar hablando. Es la palabra la tirana que lo lleva a tejer la soga que lo ahorcará.
Él no reacciona ante esa palabra artífice del nudo en la soga, constructora de la ilusión dañina según la cual Stelle forma parte de la conspiración imaginaria. Ya no confiará. Ya no podrá confiar. El desenlace está realizado de antemano, confirmando que el desastre cuida de todo.*

* Las cursivas pertenecen a La escritura del desastre, de Maurice Blanchot.
** Es probable que el texto no resulte del todo claro sin ver la película. Recomiendo verla porque es una gran obra. Si usted quiere volver a leer el texto luego, está invitado también. Clickeando este enlace puede verla.

0 comentarios: